Campo Base Annapurna Sur

Todavía más lejos que de costumbre, algo que llevaba años queriendo hacer: un trekking por Nepal hasta el Annapurna. Gracias a la la ONG SOS Himalaya (www.soshmalaya.org), fundada por la familia de Iñaki Ochoa de Olza, himlayista muerto en la arista Este del Annapurna en 2008.

.

La Granja de San Ildefonso

Yo no soy mucho de palacios, pero si hay algo en lo que fijarse en La Granja es en los árboles: pinsapos, cedros del Líbano, sequoyas... con más de 160 años algunos de ellos.

Ayllón y Maderuelo

Salimos temprano por la carrtera de Burgos. Una vez cruzado Somosierra, cogemos la carretera de Soria, hasta Ayllón. Si aparcamos a la entrada, llegamos enseguida a la maravillosa Plaza Mayor.

Muy cerca, por la carretera que nos llevaría a Arana de Duero, está Maderuelo. La entrada es literalmente la puerta de un castillo, y justo detrás, en la Posada,  se come uno de los mejores corderos de Segovia.

Valverde de los Arroyos y la Chorrera de Despeñaelagua

Esta vez nos hemos ido más lejos, hasta el rincón donde Guadalajara linda con Madrid y Segovia. En uno de los entornos más bonitos de la sierra está Valverde de los Arroyos, todo construído en pizarra negra.

 Muy cerca, la Chorrera de Despeñaelagua, este año con un caudal de agua que nunca había visto, procedente del deshielo de la nieve acumulada durante el invierno en el Ocejón.

Desde la cascada, al fondo, el Santo Alto Rey.

Un tesoro a las puertas de Madrid: El Pardo

De hecho, un barrio de Madrid, en un entorno envidiable. Un paseo  por las orillas del Manzanares, desde el puente de los Capuchinos hasta el aliviadero del embalse. Merece la pena.

Si vais temprano, podreis encontrar fácilmente venados o incluso jabalíes.

Nosotros esta vez no tuvimos suerte...

Aragosa

Una ruta sencilla por uno de los últimos parques naturales de Guadalajara, el camino entre Aragosa y La Cabrera. Sin apenas desnivel, siguiendo el curso del río Dulce, es una marcha ideal para una mañana de primavera.

Y con un poco de suerte podemos encontrarnos con sorpresas como buites sobrevolándonos.... o un pequeño sapo intentando esconderse.

Por la ribera del Duero

Comenzamos por la antigua Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña, al norte de la provincia de Segovia.

¿Quién ha dicho que el románico sea aburrido? Viendo estos canecillos de algunas iglesias, parece que algunos se lo pasaban muy bien...

 

Esta es la entrada a Fuentidueña...

 

y esta la cabecera de la iglesia.

Todos los pueblos tienen una iglesia románica. Esta, Santa María de Cárdaba, al lado de la carretera, vio como el pueblo que presidía desaparecia en el soto circundante.

Terminamos visitando en Sacramenia el soto de San Bernardo, y pasado Peñafiel, en Valbuena de Duero, el antiguo convento hoy sede administrativa de las Edades del Hombre.